El Boletín Septiembre 2022

Todo comienza por una base sólida... y una receta secreta.

 
¿Qué tienen en común las rectificadoras de herramientas y los edificios? La necesidad e importancia de tener una base sólida.

Sin lugar a duda, un componente esencial para lograr buena precisión y repetibilidad al momento de rectificar una herramienta de corte es la base. Tener una base sólida para una máquina es fundamental para lograr una producción estable y sin contratiempos. Como parte del compromiso de ANCA con la integración vertical, a finales de la década de los 80, Pat McCluskey decidió reemplazar las bases que luego se subcontrataron por una base diseñada y fabricada por ANCA.

La investigación de McCluskey se llevó a cabo primordialmente en Europa en participacion conjunta con la Universidad de Aquisgrán, con la cual se había llevado a cabo algunas investigaciones sobre hormigón polimérico en aplicaciones de máquinas herramienta. Trabajó con consultores alemanes y locales para desarrollar la receta ANCA para la fabricación de bases de hormigón. La tecnología de moldeo de base que desarrollaron ha sido desde entonces una parte importante de las bases rígidas de ANCA.

La primera base se vertió a finales de 1989. Y se siguió vertiendo y probando hasta que todos quedaron completamente satisfechos. Llamada ahora ANCAcrete, esta tecnología ofrecerá la mejor base posible para rectificadoras CNC de precisión, reduciendo así la vibración y aumentando la rigidez general de la máquina.

Desde 1991 hemos estado utilizando la tecnología de base polimérica que forma el cimiento de todas las máquinas ANCA. A menudo los clientes nos piden que les expliquemos los beneficios del hormigón polimérico y les explicamos que este, por su propia naturaleza, tiene una masa térmica elevada, razón por la cual nuestras bases son buenas para la absorción de calor extremo.
 
Eso significa que a lo largo de los procesos de producción, su crecimiento y contracción están muy controladas y lleva un largo tiempo, lo que deja ver que el proceso es muy, muy estable. La segunda característica importante del hormigón polimérico es que hace más de 20 años cuando diseñamos la mezcla, se hizo para imitar muy de cerca los coeficientes térmicos de expansión del hierro fundido. Esto significa que a medida que nuestras máquinas se calientan y se enfrían, podemos controlar la expansión y contracción de la máquina, lo que a su vez nos da control sobre los procesos de producción para asegurarnos de que la máquina se alinee con la forma en que queremos que reaccione.
 
Entre la gran masa térmica, el coeficiente de expansión térmica muy relacionado con el hierro fundido y las características de absorción de vibraciones, ANCAcrete contribuye significativamente a la rigidez general de la máquina. Para nuestros clientes esto se traduce en herramientas de alta precisión y con un acabado superficial sin igual.

Esta es la primera serie de un ciclo que analiza la gama de tecnología ANCA, la cual hemos venido desarrollado y refinado a lo largo de los años para ofrecer al mercado lo mejor en su clase. En ANCA hemos aprovechado por completo los beneficios de la integración vertical y somos la única empresa de máquinas rectificadoras en el mundo que diseña y fabrica la máquina completa, incluida la construcción del CNC, los motores y husillos de precisión y, por supuesto, nuestras bases de hormigón polimérico ANCAcrete, hechas en casa.

Esto significa que los clientes disfrutan de los beneficios de un fabricante que entiende su producto por completo, está detrás de la calidad de cada elemento y está en una posición única para entregar un diseño personalizado tanto del hardware como del software para así satisfacer las necesidades particulares de nuestros clientes.
   
 

10 agosto 2022